La aromaterapia es una forma de medicina alternativa basada en el uso de materiales aromáticos, incluidos los aceites esenciales y otros compuestos, con el objetivo de mejorar el bienestar psicológico o físico.
Se ha utilizado durante miles de años y hoy en día su popularidad, y la de los aceites, ha aumentado. De igual forma, los mitos y la desinformación sobre sus usos y aplicaciones han ido abriéndose paso.
Cabe recordar que si bien son productos de origen natural, deben tomarse precauciones al momento de usarlos, ya que su mal manejo puede traer consecuencias para la salud.
A continuación te compartimos algunos de los mitos más comunes sobre los aceites y la verdad detrás de ellos.
Los aceites esenciales pueden combatir enfermedades por sí solos
La aromaterapia y el uso de aceites esenciales contemplan un acercamiento holístico para combatir enfermedades; es decir, sólo son métodos auxiliares para ayudar a combatirlas y no es recomendable que sustituyan a la medicina convencional.
Sin embargo, pueden utilizarse para aliviar el estrés, mejorar el estado de ánimo de las personas que sufren alguna patología, así como ayudar a promover la actividad mental y concentración. También se han comprobado efectos sinérgicos al combinar el uso de aceites esenciales con agentes desinfectantes y antibióticos, permitiendo una rápida recuperación y la reducción de dosis de antibióticos para combatir infecciones, sin embargo, esto debe ser manejado por un especialista y no se recomienda hacerlo sin una orientación profesional.
Los aceites esenciales pueden ingerirse
No todos se pueden ingerir. Existen diversos grados de aceites esenciales, siendo uno de ellos el grado alimenticio. Aunque todos tienen un origen natural y algunos de ellos comparten nombre y aroma con frutas o hierbas, solamente los de grado alimenticio son aptos para ingerirse. Este tipo de aceite debe estar especificado por el fabricante, ya sea en la etiqueta del producto o en su empaque.
De cualquier forma, es recomendable que su consumo sea indicado y supervisado por un profesional.
Consumir un aceite esencial que no sea de grado alimenticio, puede causar envenenamiento o severos daños a tu salud, por lo que te recomendamos corroborar que tu aceite sea de grado alimenticio si es que requieres consumirlo.
Los aceites esenciales pueden aplicarse directamente sobre la piel
Se recomienda hacerlo en dosis muy pequeñas o diluir los aceites en crema humectante o aceite base o portador, como puede ser Almendras Dulces o Semilla de Uva.
Cabe aclarar que los efectos que puedan llegar a tener dependen de la persona y su historial médico.
Es muy importante que a la primera señal de enrojecimiento, comezón o dolor en la zona, suspendas la aplicación y consultes a un médico.
Recuerda que para disfrutar y aprovechar al máximo los beneficios de la aromaterapia y los aceites esenciales, es necesario estar informados sobre su correcto manejo y posibles efectos adversos.
Si tienes dudas o preocupaciones relacionadas a tu salud, consulta con un experto.